lunes, 19 de julio de 2010

Cosillas por casualidad

Ayer, casi por casualidad, descubrí algo que me llamo la atención, un curioso poema que una amiga me enseño, de un autor que desconocía completamente: Oliverio Girondo, y solo con leer unos versos sueltos, me conquisto. La cosa es que este poema encaja perfectamente dentro del caótico contenido de este blog, entre lo real y lo irreal, lo bufonesco y lo dramático, lo cotidiano y lo irrepetible. Dentro de lo Contradictorio y del tejido sin dobleces del que se construye la fantasía, los bucles temporales y duendes, hadas, dragones, la teoría de cuerdas, la realidad y todo lo demás que ronda por aquí. Os dejo con él y espero vuestros comentarios:








Que los ruidos te perforen los dientes,

como una lima de dentista,

y la memoria se te llene de herrumbre,

de olores descompuestos y de palabras rotas.



Que te crezca, en cada uno de los poros,

una pata de araña;

que sólo puedas alimentarte de barajas usadas

y que el sueño te reduzca, como una aplanadora,

al espesor de tu retrato.


Que al salir a la calle,

hasta los faroles te corran a patadas;

que un fanatismo irresistible te obligue a prosternarte

ante los cubos de basura

y que todos los habitantes de la ciudad

te confundan con un madero.


Que cuando quieras decir: "Mi amor",

digas: "Pescado frito";

que tus manos intenten estrangularte a cada rato,

y que en vez de tirar el cigarrillo,

seas tú el que te arrojes en los ceniceros.


Que tu mujer te engañe hasta con los buzones;

que al acostarse junto a ti,

se metamorfosee en sanguijuela,

y que después de parir un cuervo,

alumbre una llave inglesa.

Que tu familia se divierta en deformarte el esqueleto,

para que los espejos, al mirarte,

se suiciden de repugnancia;

que tu único entretenimiento consista en instalarte

en la sala de espera de los dentistas,

disfrazado de cocodrilo,

y que te enamores, tan locamente,

de una caja de hierro,

que no puedas dejar, ni por un solo instante,

de lamerle la cerradura.






PD: La foto se la robe a quien me enseño el poema, y es un pequeño homenaje.



Nos leemos.

martes, 6 de julio de 2010

Efemerides

Se que muchos no sabéis que día es hoy, a muchos otros os dará igual, pero no podía evitar señalar que justo hoy, a eso de de la 1:21 (dato no demasiado importante, porque no es nuestra franja horaria, y no me apetece calcular la hora local) un Delorean proveniente de 1985 llegara a algún lugar de Estados Unidos. Si, hoy es justo el día al que Marty Mcfly llegaba en Regreso al Futuro 2. Si de acuerdo, es una chorrada enorme, pero paraos a pensar pro un segundo, que en 1985, el 2010 era el futuro, y en el futuro había coches voladores que funcionaban con deshechos para proteger el medio ambiente, aeropatines, y muchas mas cosas chulas. Igualito igualito que la realidad... que cosa tan curiosa esa de viajar en el tiempo...


viernes, 4 de junio de 2010

Y dile al Universo que deje de mirar...


Dile al universo que deje de mirar, que aparte la vista un rato, o vea el televisor.
Que deje de prestar atención, por unos minutos solamente. Unos segundos perdidos de golpe, y que a nadie le importen.
Si se lo dices, dile de paso que el karma no funciona como debería, que hace algún tiempo que la balanza se desequilibro, y los castigos dejaron de ser proporcionales a las penas. ¿Que sentido tiene todo entonces?
Dile que si el karma no funciona, la gente dejara de creer en otras cosas más complejas, como el yogur desnatado, o la tdt. Las personas... la gente, dudaran de todo, de cosas que siempre han dado por sentadas. ¿Ves eso de que el sol salga todas las mañanas? Tal vez salga por que sí, pero parate a pensar que el sol, en realidad, solo salga porque nosotros esperamos que sea así. Si la gente empezase a dudar de eso... tal vez mañana no salga el sol, tal vez mañana no haya periódicos, las cafeterías no habrán, las bibliotecas no cierren. Nadie respetaria el turno en la frutería. El mundo seria un caos y nada tendría sentido.
Así que, dile por favor al universo que deje de mirar, que mire a otro lado, mientras arreglamos el Karma. Dile que es por su bien, y cuando todo vuelva a funcionar... nos lo agradecera.

lunes, 3 de mayo de 2010

Mientras dormias...

Ayer volví a mirarte mientras dormías. Mientras lo hacia, pensé en nuestros juegos, nuestras riñas, nuestros dime y diretes. Pensé en el tiempo que ha pasado desde la última vez que oí tu voz. Más de lo que me gustaría. ¿Minutos? ¿Horas? ¿Días?¿Meses?... años. Se me hace una eternidad. Media vida. Tres vidas enteras y la mitad de la siguiente.



Ayer volví a hablarte mientras dormías, esperando ilusamente que esta vez me responderías. Te hable de mi vida. De mi culpa. De mi miedo. Mi alegría. De todo lo que es y será. De lo que fue y debió ser. De donde se separaron nuestros caminos. De donde se hizo silencio entre nosotros. De donde se torcio el camino.



"Enséñame el camino a casa", te pedí. "Enséñame a volver". "Vuelve conmigo... te echo de menos".



Silencio. Otra vez.



Y de nuevo. Después de tanto tiempo, de tantos años, de tanto camino andado. De nuevo lloro. Solo. Sentado frente a ti. Mirándote mientras duermes. Mientras clavo mis ojos en las flores, ahora marchitas que duermen junto a ti. Incapaz de volver a mirarte. Porque no hace falta que digas nada. Se lo que dirías. Se lo que me dirías. Pero no importa. Da igual.



Las palabras se me atragantan en la boca mientras miro la fotografía que tengo en mis manos. Consigo alzar la cabeza, y mirarte de nuevo. Mientras duermes.



Y de nuevo, mientras te miro, solo alcanzo a decir "...lo siento, perdóname. Te echo de menos".



Y rezo.



Ojala algún día puedas estar orgulloso de mi.



Te echo de menos ...

viernes, 2 de abril de 2010

Huellas...



"Las palabras de un hombre han de ser como sus huellas, siempre deben llevarte hasta él."
-Antiguo Proverbio Samurai.

sábado, 27 de marzo de 2010

Acuerdate de vivir...



Ven, coge mi mano y bailemos en el aire.
Bailemos descalzos en la lluvia.
Escucha el ritmo del silencio, la cadencia de mis pies, el aletear de tus alas.
Ven, coge mi mano y bailemos en el aire.